"LO NORMAL ES QUE A LOS CINCO AÑOS QUIERAN SER SUPERHEROES O ASTRONAUTAS; LO NORMAL A LOS OCHO AÑOS ES QUE QUIERAN SER BOMBEROS O DEPORTISTAS; LO NORMAL ES QUE A LOS ONCE AÑOS QUIERAN SER ESTRELLAS DEL ROCK: LO NORMAL A LOS TRECE AÑOS ES QUE SE INICIEN EN EL CONSUMO DEL ALCOHOL, Y ESTO NO DEBERIA SER NORMAL, HABLAR CON ELLOS HOY ,EVITARA UN MAL TRAGO MAÑANA."
Esta es la nueva campaña que ha lanzado el Ministerio de Sanidad, Politica Social e Igualdad para, de nuevo, alertar a los padres sobre el problema del alcohol en nuestros jóvenes.
El alcohol etílico es considerado una droga porque cambia la forma en que las personas perciben el mundo, sienten y se comportan. Es una droga permitida y más consumida que la heroína o la cocaína.
¿Entonces el alcohol es malo? La respuesta correcta sería que ni es malo, ni es bueno. Me explico: si esporádicamente te tomas una copa, si no tienes ninguna contraindicación y tienes la edad suficiente para saber lo que haces, entonces no pasa nada: es malo en el momento en que te hace exclavo de él. Aquí podemos empezar a explicar el spot, "Los jóvenes beben a los trece años" ¡que barbaridad! y si nos damos una vuelta, por las noches, sobre todo en festivo o visperas o cualquier motivo que les venga en gana, por nuestro pueblo o ciudad, lo comprobaremos. Chicos y chicas con botellas de whisky, ron etc, haciendo lo que se llama "botellón" (no incluímos, por supuesto, a todos). Unos lo hacen porque se ven comprometidos por sus amigos, otros quiern parecer mayores, otros quieren vencer su timidez...
Todos hemos pasado por la etapa de la adolescencia y sabemos lo propensa que es esa etapa para que influyan en ellos. "Si bebo, pierdo la timidez y asi ligo y me lo paso mejor" "todos beben, ¿por qué yo no?" "mis padres no me entienden".
Tienen una mala información, y un joven con trece años ha de tener unas reglas de conducta que deben imponerlas en su casa, ya que el consumo de esta sustancia con el tiempo les traerá problemas y, en el peor de los casos, la muerte.
Un adolescente de trece años debe estar controlado, no vigilado, por sus progenitores, puesto que está despertando a la vida, y están ávidos de conocer cosas nuevas. Es en ese momento cuando los padres tienen que poner mayor interés en su educación, puesto que tienen que resolver todas sus dudas, y alertarles de los peligros que pueden correr con determinadas cosas, entre ellas, el consumo de alcohol. Hay que advertirles que el consumo abusivo del mismo, además de enfermedades físicas como cardíacas, de hígado, estómago, etc, también producen enfermedades mentales y esto es más peligroso en la edad de crecimiento. De ahí que no se deje vender alcohol a menores de 16 años.
Pero también hay que ponerles en antecedente de que también pueden provocar daños externos a ellos, como malos tratos, robos, absentismo laboral, accidentes de trafico (ya sabemos que hasta los 18 años no pueden conducir, pero ese obstáculo es fácil de saltar).
Un dato alarmante es que en este pais se producen 12000 muertes al año por alcoholismo, mientras que por el consumo de heroína o cocaína son unas 470.
Padres, ¡no hagáis la vista gorda, no miréis para otro lado o lo justifiquéis cuando vuestro hijo se comporte de manera rara! Averiguad el por qué, hablad con ellos y, si no podeis solos, pedid ayuda a personas especializadas.
Los hijos son parte de los padres y, como cuando se tiene un dolor se toma un remedio para aliviarlo, de la misma mamera hay que ayudarles cuando lo necesiten, para que el mal no sea mayor.
No es culpa de la sociedad, es culpa, en primer lugar, de los progenitores, pro-ge-ni-to-res, la palabra es clara. De pequeños les damos de comer cuando no saben coger la cuchara, les ayudamos a andar cuando no saben, les llevamos al colegio los primeros años, luego saben ir solos, les reñimos si se portan mal o dicen alguna palabra que no está bien ¿Creemos que desde los trece años ya estan creciditos para caminar solos?
No hay comentarios:
Publicar un comentario